La propia víctima, ya mayor de edad, rompió el silencio y reveló que fue presionada por su hermana para incriminar falsamente a Richard Mamani, con el fin de encubrir al verdadero agresor: su cuñado.
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La propia víctima, ya mayor de edad, rompió el silencio y reveló que fue presionada por su hermana para incriminar falsamente a Richard Mamani, con el fin de encubrir al verdadero agresor: su cuñado.
“A mí, mi cuñado me ha violado cuando tenía siete y nueve años”, confesó la joven a los medios de comunicación. Entre lágrimas, relató cómo su hermana la amenazó para que no contara la verdad y le prohibió irse con sus padres al campo. “No quería que diga que su marido me violó. Me obligó a echarle la culpa a mi primo Richard”, dijo.
Mamani fue sentenciado en 2016, a sus 19 años, por un tribunal de Camargo (Chuquisaca), acusado de violar a una niña de 12 años y fue condenado a 20 años de prisión.
“No quiere decir que su marido me ha violado. Ella me amenazaba, no me dejaba irme a mi casa”, contó. La mujer acusó a su hermano de ser cómplice y cree que su hermana le pagó para ser un falso testigo delhecho.
La revelación fue clave para la revisión del caso y la posterior liberación de Mamani el pasado 25 de junio en el penal de Morros Blancos, Tarija. Acompañado por el Defensor del Pueblo, Pedro Callisaya, y la magistrada del Tribunal Supremo de Justicia, Rosmery Ruiz, el joven recobró su libertad tras nueve años de encierro.
Durante su proceso, Richard Mamani nunca aceptó declararse culpable, a pesar de la presión para someterse a un juicio abreviado. Su resistencia y la posterior confesión de la víctima permitieron desmontar una condena basada en una mentira. “Estuve nueve años encerrado sin haber hecho nada. Fue muy duro para mí y para mi familia”, expresó.
BD/RED