“No tienen por qué estar ahí Evo ni Álvaro”; García Linera deslinda responsabilidad en el operativo en el hotel Las Américas

Brújula Digital|23|04|24|

Después de que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) recomendó investigar ejecuciones extrajudiciales en el caso hotel Las Américas, el exvicepresidente Álvaro García Linera deslindó responsabilidad de él y del expresidente Evo Morales en ese operativo que desarticuló, en 2009, un presunto grupo separatista. Indicó que se debe indagar la operación policial como tal y no la orden para ejecutarla, que, asegura, buscó la defensa de la integridad de la patria.

“En este tipo de investigaciones es muy puntual, la investigación es si hubo o no excesos en la intervención. No se está investigando si fue correcta la decisión de proteger al Estado boliviano. Eso no se está investigando. No tienen por qué estar ahí Evo ni Álvaro. Se está investigando si en la intervención hubo excesos. ¿Evo estuvo en la intervención?  No estaba, estaba en Venezuela. ¿Álvaro estuvo en la intervención? No estaba, estaba en Palacio de Gobierno. La intervención, que es muy precisa, está localizada, hotel Las Américas, Santa Cruz”, dijo en una entrevista con Detrás de la Verdad.

Justificó la desarticulación de ese grupo que, según dijo, estaba compuesta por “mercenarios (que) venían a matar, no a comer majao” y aseguró que la orden para ejecutar el operativo en el hotel Las Américas, el 16 de abril de 2009, la dieron él y Morales, como también la instrucción de detener a los involucrados.

“La instrucción que da un presidente, la instrucción que da un presidente en ejercicio cuando tiene esta información es: detengan a esa banda terrorista antes de que cometan sus fechorías… Yo instruí desde antes, porque esto venía desde antes, hay que detenerlos, hay que detenerlos y llevarlos a la justicia”, afirmó.

En ese sentido, indicó que se dieron las instrucciones a la Policía para impedir que ese grupo, calificado de separatista continúe con sus operaciones en Bolivia, respaldadas por políticos y empresarios de oposición. No obstante, hizo una diferenciación con lo planteado por la Corte IDH, que pidió investigar las ejecuciones extrajudiciales.

Al sostener que la operación de desarticulación del grupo estuvo en manos de la Policía, señaló que deben ser los operadores de la intervención los que deben ser investigados.

“Ese es un tema que tiene que restringirse a la actividad estrictamente operativa, porque lo que le preocupa a la CIDH (Comisión Interamericana de Derechos Humanos) es ¿hubo exceso o no hubo exceso en el operativo? Entonces, que vaya a declarar un presidente es un exceso. Imagine usted si tiene que declarar el presidente cada vez que se instruye en una guerra, en un operativo policial. Es una locura”, sostuvo.

Por otra parte, García Linera insistió en que los financiadores de ese grupo, presuntamente separatista, deben ser investigados y sancionados por la justicia, luego de una investigación y un proceso de judicial.

“Que se averigüe si hubo excesos, que se reparen esos excesos. Si no hubo excesos, queda todo tranquilo, pero que quede en ese ámbito. Y luego hay que pasar a la investigación (sobre los) financiadores”, advirtió la exautoridad.

Antecedentes

El operativo del hotel Las Américas, que tuvo lugar hace 15 años, presuntamente estaba destinado a desarticular un grupo separatista.

Allí fueron ejecutadas tres personas Eduardo Rózsa Flores (húngaro boliviano), Árpád Magyarosi (húngaro) y Michael Martin Dwyer (irlandés), mientras que sobrevivieron y fueron detenidos Mario Tadic (boliviano croata) y Elod Tóásó (húngaro). Estos dos últimos y otros implicados en el proceso acudieron a la CIDH para denunciar violaciones a sus derechos.

Al atender este proceso, la Corte IDH emitió recomendaciones, entre las que se encuentra abrir un proceso judicial para averiguar si hubo ejecuciones extrajudiciales en el operativo.

La semana pasada, el procurador general del Estado, César Siles, informó que el proceso ya está en curso. La Fiscalía informó que conformó una comisión para indagar el tema, mientras que desde la oposición se señaló como responsables de la operación a Morales y García Linera, por lo que ambos tendrían que  ser investigados.

En abril de 2009, Morales dejó como presidente interino a García Linera, cuando se desarrolló el operativo en el hotel Las Américas. No obstante, desde Venezuela, Morales dijo que él dejó “instrucciones precisas” a García para ejecutar el operativo y detener a los integrantes de ese grupo presuntamente irregular que preparaba un magnicidio.

Tras el operativo de 2009, se abrió un juicio denominado Terrorismo, en contra de 39 personas, entre los que se encontraban los sobrevivientes del operativo y políticos de oposición al gobierno de Morales, quienes habrían financiado al grupo irregular. El proceso judicial estuvo plagado de una serie de denuncias de irregularidades, desde la falta de un fiscal que esté al mando de la operación, el plantado de pruebas y denuncias de una acción política para desarticular a políticos de oposición. El caso fue cerrado en 2020, en el gobierno de la expresidenta Jeanine Añez, debido a que el Ministerio de Gobierno dejó de ser el denunciante.

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