Evo declara emergencia en el MAS; ve que misión del nuevo vocal del TSE es inhabilitarlo y proscribir al frente político

Brújula Digital|11|04|24

En medio de los trámites para la realización de un nuevo congreso nacional del partido, Evo Morales declaró este jueves en emergencia al MAS, luego de señalar que, según “información oficial”, Gustavo Ávila, nuevo vocal del Tribunal Supremo Electoral (TSE) designado por el presidente Luis Arce, tiene dos misiones: inhabilitarlo como presidenciable y proscribir a ese frente político.

La afirmación de Morales fue emitida en una conferencia de prensa, en la que estuvo acompañado de dirigentes cercanos.

“Aquí hay un tema de fondo, sospechosamente ha sido cambiada la delegada presidencial ante el Tribunal Supremo Electoral, Dina Chuquimia (…) pero ha sido designado, por la atribución del presidente Lucho Arce, Gustavo Ávila. El mandato, la orden de la Casa Grande del Pueblo, es que Gustavo Ávila sea presidente del TSE, información oficial, con dos misiones: primero inhabilitar a Evo como candidato a presidente y, segundo, proscribir al MAS-IPSP”, sostuvo Morales.

El 4 de abril, de manera sorpresiva, Ávila fue posesionado como vocal del TSE designado por el Presidente, en reemplazo de Chuquimia, quien cuestionó esa decisión porque aún no cumplió los seis años de mandato que tiene, tras ser designada en abril de 2021, ni tampoco renunció al cargo.

“Frente a esa decisión dictada desde la Casa Grande el Pueblo, a los militantes (del MAS), a los que tienen convicción revolucionaria, vocación democrática, (les digo) a partir de este momento nos declaramos en estado de emergencia”, por las misiones que tiene Ávila, sostuvo.

El presidente del MAS afirmó que la “información oficial” que tiene corresponde a los mismos trabajadores de la Casa Grande del Pueblo, “gente comprometida”, y a los policías y militares “patriotas”.

Morales también se refirió a las observaciones que hizo la Secretaría de Cámara del TSE ayer al pedido de supervisión al congreso que convocó su sector para el 10 de junio en Villa Tunari, las mismas que deben ser subsanadas en un plazo de dos días.

Si bien el MAS evista recibió cuatro observaciones a su convocatoria a congreso, Morales puso énfasis en una de ellas, la referida a la exigencia de consensuar la citación con los sectores sociales del Pacto de Unidad, un aspecto que fue interpretado por la parte legal del MAS como que el TSE les quiere obligar a negociar con dirigentes paralelos arcistas de esas organizaciones.

Al respecto, Morales reiteró que los dirigentes arcistas no tienen la representación de las organizaciones del Pacto de Unidad. Por ejemplo, dijo que Lucio Quispe, secretario ejecutivo de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), fue elegido de forma irregular en un congreso realizado en El Alto. Acotó que este fue militante de Unidad Cívica Solidaridad (UCS) hasta 2019.

De igual manera, dijo que Guillermina Kuno, secretaria Ejecutiva de la Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Indígenas Originarias de Bolivia “Bartolina Sisa”, era militante del partido Transformación, Democracia y Patria (Tradepa) hasta 2019, pero que ahora figura como militante del MAS.

Al referirse a Esteban Alavi, de la confederación de interculturales, indicó que este dirigente fue electo en una reunión que inicialmente fue convocada como ampliado, pero que luego pasó a ser congreso, en una situación irregular.

Luego de citar esos antecedentes, Morales sostuvo que no puede consensuar con esos dirigentes el próximo congreso del MAS. Por el contrario, dijo que acordó la reunión de ese frente político con otros representantes de los campesinos, “Bartolinas” e interculturales, por lo que se cumplió con su estatuto interno y rechazó el cuestionamiento del TSE.

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