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Mundo | 01/03/2020

A los 95 años, murió el poeta y sacerdote nicaragüense Ernesto Cardenal

A los 95 años, murió el poeta y sacerdote nicaragüense Ernesto Cardenal

Ernesto Cardenal. Foto: La Nación

La Nación|02|03|20|

El poeta y sacerdote nicaragüense, Ernesto Cardenal, murió hoy a los 95 años a causa de un paro cardíaco, después de permanecer hospitalizado por cansancio y problemas respiratorios derivados de una descompensación generalizada. "Murió hoy, se nos fue en paz absoluta, no sufrió dolor", confirmó Luz Marina Acosta, asistente del poeta desde hace más de 40 años.

Es considerado como uno de los últimos autores más prestigiosos de América Latina y está estrechamente vinculado a las luchas progresistas de la región y al movimiento sandinista de Nicaragua. El poeta era un reconocido representante de la Teología de la Liberación. Cardenal y otros curas adscritos a esa corriente fueron suspendidos del ejercicio del sacerdocio en 1984 por el entonces papa Juan Pablo II.

Sus obras fueron traducidas a más de 20 idiomas y recibieron reconocimientos internacionales como la orden Legión de Honor en Grado de Oficial del Gobierno de Francia. Su trabajo incluye ensayos, memorias y una veintena de poemarios, entre los que destacan " Epigramas" y "Somos polvo de estrellas".

Cardenal sufría problemas cardíacos y renales. A principios de 2019, estuvo internado en un hospital de Managua por una grave infección renal. Sin embargo, sobrevivió y volvió a su rutina literaria con la distintiva boina negra que solía llevar. Un familiar cercano dijo que no logró vencer los problemas de salud propios de su edad, en especial del corazón y de los riñones.

Cardenal nació en la ciudad central de Granada el 20 de enero de 1925, en el seno de una de las familias más influyentes del país. Pasó su niñez en la mansión familiar, a orillas del Gran Lago de Nicaragua. Estudió en Managua y luego viajó a México para cursar literatura y filosofía, más tarde continuó sus estudios en Nueva York. También pasó una temporada en Europa. En 1965 fue ordenado sacerdote en Managua y luego fundó una comunidad cristiana, casi monástica, en una de las islas del Gran Lago que adquirió con el dinero familiar.

Pero mucho antes de su vocación religiosa surgió su amor por la literatura, en la que debutó antes de aprender a leer con unos versos dedicados a la tumba del poeta nicaragüense Rubén Darío, inspirados en las rimas que le leía su padre. "Tuve la vocación de poeta desde que nací. Ya tarde en la vida me vino el apego religioso. Fui desde entonces un poeta que entregó parte de su trabajo a Dios. A eso añado la vocación revolucionaria: la entrega a Dios me llevó a entregarme al pueblo", dijo Cardenal al diario mexicano La Jornada en una entrevista en 2003.

En el plano político, el poeta comenzó a mostrar simpatía por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) desde principios de la década de 1960, pero tras el arribo de la organización al poder en 1979 se acrecentó su adhesión e, incluso, fue nombrado ministro de Cultura, cargo al que perteneció por alrededor de ocho años.

Por ese compromiso político, el Papa Juan Pablo II lo sancionó "A Divinis" en 1984, prohibiéndole ejercer el sacerdocio junto a otros tres curas sandinistas. La sanción papal se prolongó durante 35 años a pesar de que Cardenal se distanció del sandinismo y de que en 2007, tras el regreso de Ortega al poder, lo criticó duramente. A mediados de febrero de 2019, cuando Cardenal estuvo grave, el Papa Francisco anuló su sanción.

Agencias AFP, Reuters y DPA



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