Washington asegura que este grupo es encabezado por el presidente venezolano, Nicolás Maduro, y su titular de Interior, Diosdado Cabello.
Brújula Digital|EFE|24|11|25|
Desde este lunes, el Cartel de los Soles es considerado por el Gobierno de Estados Unidos como un grupo terrorista extranjero (FTO). El Departamento de Estado lo vincula a la cúpula del Ejército y el Gobierno venezolano.
El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, ya anunció el 16 de noviembre que, según el Gobierno de Donald Trump, "existe una base fáctica suficiente" que demuestra que el Cartel de los Soles cumple con las condiciones descritas en la ley de inmigración y nacionalidad que regula la designación de FTOs.
El Departamento de Justicia de EEUU considera que el grupo es encabezado por el presidente venezolano, Nicolás Maduro, y su titular de Interior, Diosdado Cabello.
La norma en mención establece que una FTO debe ser un grupo extranjero que participe "en actividades terroristas o terrorismo" y que debe "amenazar la seguridad de los ciudadanos estadounidenses o la seguridad nacional de Estados Unidos", lo que incluye los ámbitos de defensa, relaciones exteriores o intereses económicos.
Esta decisión sucede después de que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos ya catalogara en julio al Cartel de los Soles como un grupo terrorista global especialmente designado (SDGT), aunque el Gobierno venezolano aseveró entonces que esta organización es un "invento" de Estados Unidos.
Rubio considera que el Cartel de los Soles, y otros FTO designados, como el Tren de Aragua y el Cartel de Sinaloa son responsables de la violencia terrorista en el hemisferio americano, así como de traficar drogas hacia Estados Unidos y Europa.
Antecedentes
Aunque las autoridades estadounidenses aseguran que el Cartel de los Soles (nombre que supuestamente procede de las insignias que lucen los generales) es un grupo integrado principalmente por militares venezolanos desde los años noventa del siglo XX, las averiguaciones de la Administración de Control de Drogas (DEA) no se oficializaron hasta marzo de 2020, durante el primer mandato de Trump.
La designación del cartel como FTO coincide con la intensificación de la estrategia de presión de Trump sobre Maduro a través de un creciente despliegue militar en el sur del mar Caribe, con el que la Casa Blanca dice combatir el narcotráfico, lo que ha supuesto la destrucción sumaria de en torno a una veintena -de lo que Washington asegura son- narcolanchas y la muerte de 83 de sus ocupantes.
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